¿Será tan dificil hablar español?
Yo Hablo Español
Este blog es un espacio dedicado a los estudiantes de español del instituto Michigan Valinhos que se encuentra en la ciudad del mismo nombre. Las publicaciones realizadas tienen el objetivo de compartir con el mundo los conocimientos adquiridos durante los niveles académicos por los que van pasando, teniendo en cuenta que estos niveles están dentro del Marco de Referencia Europeo de lenguas. Envía tus escritos a jespinola823@hotmail.com
viernes, 14 de septiembre de 2012
domingo, 2 de septiembre de 2012
El espanglish y la Academia Española
Ilan Stavans
Luego de muchísimo tiempo de ignorar el spanglish (son incontables las ocasiones en que su líder máximo, Víctor García de la Concha, anunció públicamente que “no existe”), la Real Academia Española de la Lengua (RAE), desde su sede en Madrid, ha incluido la palabra spanglish en su diccionario. Como su principal defensor (no por nada me llaman The Cheech and Chong Professor of Spanglish at Amherst College), la inclusión debería llenarme de júbilo.
En efecto, estamos ante un momento histórico. La primera palabra americana que, de forma oficial, viajó de regreso a la Península Ibérica después del arribo de Colón en 1492 fue canoa, que Antonio de Nebrija insertó en la edición de 1496 de su Gramática de la lengua castellana. Canoa, pues, es testimonio que las colonias no son sumisas, que terminan reconfigurando las entrañas del imperio que las dominó. Aunque esta no es la primera vez que una palabra en spanglish entra en el diccionario de la RAE, sí es la más significativa: ahora que García de la Concha felizmente ha sido reubicado por el gobierno español (tiene a su mando la dirección del evangelizador Instituto Cervantes), la Academia se ha animado a reconocer lo que el resto de nosotros ya sabía, que el spanglish es una realidad, necia e incómoda para algunos, pero realidad al fin y al cabo.
Sin embargo, no es alegría lo que siento sino frustración. Desafortunadamente, la definición que la RAE decidió insertar en su diccionario es ridícula: Modalidad del habla de algunos grupos hispanos de los Estados Unidos, en la que se mezclan, deformándolos, elementos léxicos y gramaticales del español y del inglés. ¿Deformándolos? ¿En qué siglo vive la Academia, el dieciocho, cuando se fundó, el veintiuno, en el que vivimos? A estas alturas del conocimiento lingüístico, describir el contacto dinámico entre dos lenguas como una deformación es rechazar la base misma del desarrollo verbal. Toda lengua viva está en constante movimiento. Ese movimiento implica la reinvención constante de estrategias. Únicamente las lenguas muertas pueden ser consideradas puras porque la pureza no existe en los códigos que se actualizan a diario para estar al día en términos tecnológicos, científicos, de publicidad y cultura.
¿No es el español americano una deformación del español peninsular? Sí, pero describirlo así es negar su autenticidad. A más de quinientos años de la conquista de América, la ecuación se ha invertido, al menos si usamos el ámbito demográfico como fuerza censora.
Somos más de cuatrocientos millones de hispanoparlantes en este continente. Las posibilidades del español entre nosotros son múltiples. El número de habitantes de España no llega a los cincuenta millones. ¿Quién está al mando? La lengua es de quien la usa, no de quien la legisla.
Algo similar ocurre con el spanglish.
En vez de ser una deformación, su textura es evidencia del surgimiento de una nueva manera de concebir al universo. Es cierto que esa concepción deviene del inglés y el español pero la mezcolanza, la yuxtaposición no es ni de uno ni de otro. Tampoco es una deformación sino, más bien, una posibilidad nueva. El mismo español, en la época de Gonzalo de Berceo, en el siglo trece, era un menjunje que conllevó a la gestación de lo que hoy es la tercera lengua más importante del mundo (después del mandarín y el inglés). La palabra deformación sigue denunciando una actitud colonialista. Ya es hora que España se libre de sus propios fantasmas.
Sí, el spanglish, como realidad, merece ser registrada en el diccionario de la RAE. No, este vehículo de comunicación —útil, hermoso y duradero—no es un monstruo.
Luego de muchísimo tiempo de ignorar el spanglish (son incontables las ocasiones en que su líder máximo, Víctor García de la Concha, anunció públicamente que “no existe”), la Real Academia Española de la Lengua (RAE), desde su sede en Madrid, ha incluido la palabra spanglish en su diccionario. Como su principal defensor (no por nada me llaman The Cheech and Chong Professor of Spanglish at Amherst College), la inclusión debería llenarme de júbilo.
En efecto, estamos ante un momento histórico. La primera palabra americana que, de forma oficial, viajó de regreso a la Península Ibérica después del arribo de Colón en 1492 fue canoa, que Antonio de Nebrija insertó en la edición de 1496 de su Gramática de la lengua castellana. Canoa, pues, es testimonio que las colonias no son sumisas, que terminan reconfigurando las entrañas del imperio que las dominó. Aunque esta no es la primera vez que una palabra en spanglish entra en el diccionario de la RAE, sí es la más significativa: ahora que García de la Concha felizmente ha sido reubicado por el gobierno español (tiene a su mando la dirección del evangelizador Instituto Cervantes), la Academia se ha animado a reconocer lo que el resto de nosotros ya sabía, que el spanglish es una realidad, necia e incómoda para algunos, pero realidad al fin y al cabo.
Sin embargo, no es alegría lo que siento sino frustración. Desafortunadamente, la definición que la RAE decidió insertar en su diccionario es ridícula: Modalidad del habla de algunos grupos hispanos de los Estados Unidos, en la que se mezclan, deformándolos, elementos léxicos y gramaticales del español y del inglés. ¿Deformándolos? ¿En qué siglo vive la Academia, el dieciocho, cuando se fundó, el veintiuno, en el que vivimos? A estas alturas del conocimiento lingüístico, describir el contacto dinámico entre dos lenguas como una deformación es rechazar la base misma del desarrollo verbal. Toda lengua viva está en constante movimiento. Ese movimiento implica la reinvención constante de estrategias. Únicamente las lenguas muertas pueden ser consideradas puras porque la pureza no existe en los códigos que se actualizan a diario para estar al día en términos tecnológicos, científicos, de publicidad y cultura.
¿No es el español americano una deformación del español peninsular? Sí, pero describirlo así es negar su autenticidad. A más de quinientos años de la conquista de América, la ecuación se ha invertido, al menos si usamos el ámbito demográfico como fuerza censora.
Somos más de cuatrocientos millones de hispanoparlantes en este continente. Las posibilidades del español entre nosotros son múltiples. El número de habitantes de España no llega a los cincuenta millones. ¿Quién está al mando? La lengua es de quien la usa, no de quien la legisla.
Algo similar ocurre con el spanglish.
En vez de ser una deformación, su textura es evidencia del surgimiento de una nueva manera de concebir al universo. Es cierto que esa concepción deviene del inglés y el español pero la mezcolanza, la yuxtaposición no es ni de uno ni de otro. Tampoco es una deformación sino, más bien, una posibilidad nueva. El mismo español, en la época de Gonzalo de Berceo, en el siglo trece, era un menjunje que conllevó a la gestación de lo que hoy es la tercera lengua más importante del mundo (después del mandarín y el inglés). La palabra deformación sigue denunciando una actitud colonialista. Ya es hora que España se libre de sus propios fantasmas.
Sí, el spanglish, como realidad, merece ser registrada en el diccionario de la RAE. No, este vehículo de comunicación —útil, hermoso y duradero—no es un monstruo.
viernes, 27 de julio de 2012
lunes, 23 de abril de 2012
23 de abril
El Día Internacional del Libro es una conmemoración celebrada a nivel internacional con el objetivo de fomentar la lectura, la industria editorial y la protección de la propiedad intelectual por medio del derecho de autor. A nivel internacional es promulgado por la Otan, que la empezó a promulgar por primera vez en 1995. Se celebra cada 23 de abril desde 1996 en varios países, siendo en 2008 más de un centenar.1
En varios países de habla castellana, como Cuba, se celebra este día como el Día del idioma, diferente del Día Internacional de la lengua materna celebrado el 21 de febrero.
El día 23 de abril fue elegido como Día del Libro y del Derecho de Autor, pues corresponde al fallecimiento de los escritores Miguel de Cervantes, William Shakespeare e Inca Garcilaso de la Vega en la misma fecha en el año 1616 (aunque realmente no es así: Cervantes falleció el 22 y fue enterrado el 23, mientras que Shakespeare murió el 23 de abril... del calendario juliano, que corresponde al 3 de mayo del calendario gregoriano). En esta fecha también fallecieron William Wordsworth (en 1850) y Josep Pla (en 1981). La Unión Internacional de Editores propuso esta fecha a la Unesco, con el objetivo de fomentar la cultura y la protección de la propiedad intelectual por medio del derecho de autor. La Conferencia General de la Unesco la aprobó en París el 15 de noviembre de 1995, por lo que a partir de dicha fecha el 23 de abril es el "Día Internacional del Libro y del Derecho de Autor".
Algunos países realizan actos semejantes en otras fechas. En Reino Unido e Irlanda el primer martes de marzo realizan el llamado World Book Day (Día Mundial del Libro).
Chile instituyó su propio Día del Libro en 1927, en recuerdo del natalicio de Andrés Bello, el 29 de noviembre.7 Con el paso de los años, este día cayó en el olvido y en la actualidad se celebra el Día Mundial del Libro el 23 de abril, al igual que en los demás países.
De Wikipedia
El Día Internacional del Libro es una conmemoración celebrada a nivel internacional con el objetivo de fomentar la lectura, la industria editorial y la protección de la propiedad intelectual por medio del derecho de autor. A nivel internacional es promulgado por la Otan, que la empezó a promulgar por primera vez en 1995. Se celebra cada 23 de abril desde 1996 en varios países, siendo en 2008 más de un centenar.1
En varios países de habla castellana, como Cuba, se celebra este día como el Día del idioma, diferente del Día Internacional de la lengua materna celebrado el 21 de febrero.
El día 23 de abril fue elegido como Día del Libro y del Derecho de Autor, pues corresponde al fallecimiento de los escritores Miguel de Cervantes, William Shakespeare e Inca Garcilaso de la Vega en la misma fecha en el año 1616 (aunque realmente no es así: Cervantes falleció el 22 y fue enterrado el 23, mientras que Shakespeare murió el 23 de abril... del calendario juliano, que corresponde al 3 de mayo del calendario gregoriano). En esta fecha también fallecieron William Wordsworth (en 1850) y Josep Pla (en 1981). La Unión Internacional de Editores propuso esta fecha a la Unesco, con el objetivo de fomentar la cultura y la protección de la propiedad intelectual por medio del derecho de autor. La Conferencia General de la Unesco la aprobó en París el 15 de noviembre de 1995, por lo que a partir de dicha fecha el 23 de abril es el "Día Internacional del Libro y del Derecho de Autor".
Algunos países realizan actos semejantes en otras fechas. En Reino Unido e Irlanda el primer martes de marzo realizan el llamado World Book Day (Día Mundial del Libro).
Chile instituyó su propio Día del Libro en 1927, en recuerdo del natalicio de Andrés Bello, el 29 de noviembre.7 Con el paso de los años, este día cayó en el olvido y en la actualidad se celebra el Día Mundial del Libro el 23 de abril, al igual que en los demás países.
De Wikipedia
sábado, 7 de abril de 2012
El artículo fue extraído de la página www.ultimahora.com
El respeto a la lengua española y a la mujer
La tendencia a modificar las reglas gramaticales en nombre de la igualdad de los sexos, aparece actualmente como consecuencia de la lucha de los movimientos feministas empeñados en la erradicación de la marginalidad de la mujer en la sociedad, lo que ha instalado un debate académico.
Por Renée Ferrer | Escritora *
El
respeto a las normas gramaticales de la lengua española no debe
confundirse con el respeto a la mujer. La reciente aparición de guías
para una educación no sexista, que incluye las variaciones propuestas
por algunas autoridades españolas con respecto a nuestro idioma, tomando
en consideración la igualdad de los sexos, más que un motivo de
confrontación, debería ser una oportunidad para un análisis profundo
sobre los motivos y las consecuencias de los cambios planteados.
El
debate se centra en las disposiciones dictadas desde ciertas esferas
oficiales en cuanto a "un conjunto de variantes lingüísticas que anulan
distinciones sintácticas y léxicas conocidas... con la intención de que
perviva la absoluta visibilidad de la distinción entre género y sexo",
las que se alega ayudarán a incentivar el reconocimiento de la mujer
como ser humano igual al hombre. Concuerdo absolutamente en que
expresiones tales como "los directivos acudirán a la cena con sus
mujeres" es totalmente peyorativa e insultante. Tan insultante es la
premisa, que me planteo la posibilidad de que haya nacido de una
motivación diferente, tal como que todos los directivos en cuestión
fueran hombres, y la invitación a sus esposas no fuese sino una simple
gentileza de los organizadores. Porque si se trata de una
desvalorización consciente, sería más positivo, a modo de modo de
protesta efectiva, el acceso de más mujeres a los cargos directivos,
como medio de hacer notoria la valorización de la mujer, en lugar de
proponer la reestructuración de la lengua, con todas las implicancias
negativas que ello supone.
La
tendencia a modificar las reglas gramaticales en nombre de la igualdad
de los sexos, aparece actualmente como consecuencia de la lucha de los
movimientos feministas empeñados en la erradicación de la marginalidad
de la mujer en la sociedad, cuyos logros han provocado un giro histórico
en cuanto a superar la discriminación, tan trascendente como la
abolición de la esclavitud o la batalla contra la segregación racial.
Nadie puede olvidar el papel de las grandes luchadoras por los derechos
de la mujer, la obtención del voto femenino, la paridad ante la ley,
las oportunidades laborales, el acceso al estudio y al ejercicio de una
profesión, la libertad de conducta, conquistas que enaltecen a todas las
mujeres y, con mayor razón, a las pioneras de tan justas
reivindicaciones.
Organismo vivo
La
mujer fue desde el inicio de la humanidad la guardiana del fuego del
hogar y la transmisora de la lengua, funciones que, no obstante las
exigencias de la vida contemporánea, no han expirado, confirmando con
ello su habilidad en el cumplimiento de sus múltiples y diversos roles.
Por
algo se llama lengua materna a la primera lengua del hablante. El solo
pensar en las vacilaciones conceptuales que estos cambios provocarían en
los infantes desde la cuna, obliga a una seria reflexión; sobre todo
porque las modificaciones que se proponen no obedecen a la utilización
masiva y consuetudinaria del habla, sino que vienen inducidas desde las
esferas de poder, por motivos ajenos a la evolución natural del idioma.
La
lengua es un organismo vivo que se va transformando por el uso, pero no
por medio del uso impuesto desde las esferas de poder. No creo que la
lengua española sea sexista en sí, simplemente tiene unas normas de
género diferentes a otras lenguas, como por ejemplo el inglés, que
facilita la distinción de los sexos a partir de su estructura original.
El artículo the se usa indistintamente para el artículo femenino o
masculino, "la" o "el"; muchos substantivos son válidos para ambos
géneros y otros se distinguen por medio de palabras diferentes. Por lo
tanto, no hay ninguna necesidad de aclarar el género del sustantivo con
una desinencia, pues los vocablos lo indican de por sí: boy para niño,
girl para niña; wife para esposa, husband para esposo, aunt para tía,
uncle para tío, y así sucesivamente en infinidad de casos. Estas
características lingüísticas nada tienen que ver con la valoración de la
mujer, pues se han dado naturalmente mucho antes de que se tuviera
conciencia del problema de género y la batalla por la equiparación de
los sexos. La mujer ha sido discriminada en todas las lenguas, desde
tiempos antidiluvianos, se usen o no vocablos diferentes para indicar el
género de las palabras o el sexo de las personas.
Los
ejemplos citados del inglés obedecen a la estructura lingüística y no
conllevan una garantía de mayor respeto a la mujer. El castellano no
presenta tales distinciones entre los substantivos o esa identidad del
artículo, y el hecho de crearlas artificialmente no creo que genere una
consideración más significativa hacia las mujeres; pero con toda
seguridad traerá un caos idiomático de graves consecuencias.
Si
otros idiomas tienen palabras específicas para indicar el género
masculino o femenino, aleluya, pero el español no las tiene. El primer
problema que veo en estos cambios es el desconcierto mental de los
hablantes. Las repeticiones de palabras son catalogadas como un error de
estilo incluso en las composiciones más elementales del colegio.
¿Cómo
exigirle a la niñez y a la juventud estudiosa el cultivo de un discurso
depurado si tiene que escribir o hablar con reiteraciones que lo
destruyen? ¿Cómo explicarles que la literatura tiene una intención
estética, si se masacra el idioma alegando un uso sexista, o cualquier
otro motivo que pudiera presentarse en el futuro? ¿Cómo pensar con la
velocidad habitual si tenemos que demorarnos en esas distinciones que
no agregan lucidez al concepto, sino duplicaciones a la expresión?
¿Cómo
se enfrentaría un escritor de habla hispana al papel en blanco, si
tuviera que tener en cuenta las exigencias de una nueva gramática que va
en contra de la belleza de la lengua con la cual se identifica? Con qué
nostalgia volveríamos a releer las obras maestras de la literatura
hispanoamericana, sabiendo que las reediciones no estarán de acuerdo con
los nuevos planteamientos. ¿Cómo mantener la casa sosegada si nos
cambian el lugar de las puertas y ventanas?
Capacitación y sensibilidad femeninas
Estoy
de acuerdo con que se busquen alternativas para erradicar las
expresiones claramente sexistas, porque eso no tiene que ver con la
lengua, sino con la incompetencia de alguien. Acepto que se estudie una
posible utilización de generalizaciones que abarquen al hombre y a la
mujer, como por ejemplo "el género humano", "el ser humano", "la
humanidad", en lugar de "hombre" en sentido genérico; o "la infancia",
"la niñez", "la juventud", para obviar la mención exclusiva del
sustantivo masculino globalizador. Tales expresiones denotativas de la
paridad de los sexos podrían encontrarse por medio de un urgente y
minucioso examen del idioma y sus posibilidades expresivas, a fin de
evitar toda connotación errónea que hiera los sentimientos femeninos,
para lo cual el organismo consultivo pertinente es la Real Academia de
la Lengua y las Academias asociadas.
Naturalmente,
el inicio de la lucha por los derechos de la mujer fue difícil y lo
seguirá siendo, porque no se borran siglos de postergación y
marginalidad de un plumazo. Sin embargo, el reconocimiento de la
igualdad de los sexos es un hecho actualmente, y su aceptación total
llegará por imperio de las circunstancias, de la mano de la capacitación
y la sensibilidad femeninas, y no a través de normativas que afecten
el uso corriente de la lengua. Nadie quiere, a estas alturas de la
historia, seguir cultivando el machismo, pues ese comportamiento está
tan desacreditado como manera de ser, que resulta dudoso creer que
existan muchos hombres inteligentes empeñados en mantenerlo. No hay
duda de que la mujer ha sufrido humillaciones sin cuento y que, a través
del tiempo, ha logrado sobreponerse con gran coraje a todas ellas;
pero, justamente por eso, me resisto a que el reconocimiento de la
igualdad de los sexos necesite consolidarse mediante las variaciones
propuestas.
Ya
nos han echado la culpa de la pérdida del Paraíso Terrenal, por el uso
que hizo Eva de su libre albedrío al comer del Árbol del Conocimiento
del Bien y del Mal; pero que no nos endilguen en el futuro unos cambios
gramaticales que atentan contra un esplendor de la lengua española,
porque necesitamos una certificación escrita de una paridad justamente
lograda.
*Presidenta de la Academia Paraguaya de la Lengua Española.
domingo, 25 de marzo de 2012
jueves, 15 de marzo de 2012
TRABAJO DESTACADO (nivel A2)
La alumna Cris Da Silva ha realizado un trabajo maravilloso y emotivo sobre una persona muy importante en su vida: Su Padre. En este trabajo biográfico ella revela su tremenda admiración por él y comparte con nosotros un homenaje de celebración de una vida. ¡¡Felicidades Cris, es un excelente trabajo!!
La alumna Cris Da Silva ha realizado un trabajo maravilloso y emotivo sobre una persona muy importante en su vida: Su Padre. En este trabajo biográfico ella revela su tremenda admiración por él y comparte con nosotros un homenaje de celebración de una vida. ¡¡Felicidades Cris, es un excelente trabajo!!
Pedro Marcolino da Silva nació el 16
de diciembre de 1941 en la ciudad de Siqueira Campos en el norte de Paraná. Sus
padres tuvieron nueve hijos y una vida muy simple.
A los 8 años de edad, Pedro tuvo que
abandonar el segundo grado de la escuela primaria para trabajar en la
agricultura con su padre y hermanos mayores para poder ayudar su familia. Desde
la primera infancia, siempre ha sido muy responsable, cariñoso y muy dedicado
en todo lo que hizo.
A los 24 años se casó con Helena
Maria da Silva, una mujer maravillosa, trabajadora y muy cariñosa. A los 25
años, Pedro tuvo el dolor de perder un hijo, una niña que murió poco antes del
nacimiento. Y tuvo que ser muy fuerte para darle fuerza a su esposa. Pero poco
después, realizó su sueño de ser padre. Que se repitió siete veces más.
A los 30 años, Pedro perdió a su
padre y algunos años más tarde, a su madre. Pero como siempre pensando en los
demás, no ser derrotado y siempre apoyó a sus hermanos.
A pesar de todas las dificultades
para criar ocho niños, nunca dejó que le falte nada a ellos y a su esposa.
Pedro vio morir a sus hermanos
mayores y menores hasta que se convirtió en el último.
Pero su fe en Dios siempre ha sido
tan grande y firme que siempre encontraba la fuerza para seguir adelante.
A pesar de haber estudiado muy poco,
Pedro siempre fue muy inteligente y excelente en matemáticas. Aprendió a tocar
la guitarra y la música siempre estuvo presente en su vida. Siempre fue una persona alegre, de buen humor
e hizo muchos amigos. Él fue amigo de los adultos, niños y jóvenes. Le gustaba
contar chistes, hacer bromas y hacer magia con sus inseparables cartas. Las
reuniones familiares fueron muy animadas con su guitarra. Lo que más le gustaba
era jugar “truco” con sus amigos y sus hijos.
En 2001, Pedro se mudó a Valinhos,
comenzó a trabajar en jardinería, sus manos ásperas y callosas siempre han
tenido una suavidad increíble para el cuidado de las plantas.
Se compró una motocicleta, vendió su
casa en Paraná y se compró un coche. No conducía, pero el coche fue muy
utilizado por sus hijos.
Compró tierras en Ibitinga, donde
vivía su hijo más joven entre los varones hijos que tuvo. Él construyó una
hermosa casa con la ayuda de su esposa.
Pedro había criado a todos sus
hijos, y también había ayudado a crear algunos nietos, decidió mudarse a su nueva
casa con Helena, en febrero de 2011. Él vivió allí durante solamente 5 meses
porque él estaba muy enfermo, tenía un problema muy grave en los pulmones. Se
internó por 31 días en un hospital, luchando para vivir. Los médicos no creían que todavía estaba vivo
porque sus pulmones eran casi inexistentes, ya que ha fumado muchos años de su
vida, pero su corazón seguía latiendo fuerte.
Sus ocho hijos y su esposa dieron
todo el apoyo, el amor y el cuidado que de costumbre, hicieron todo lo que
tenían que hacer, pero Pedro era una persona muy querida y maravillosa para
seguir sufriendo. Y Dios lo llevo el día 24 de julio de 2011 porque él había
cumplido su misión aquí en la tierra.
Pedro fue un ejemplo de persona, de
hijo, de esposo, de hermano, de padre, de abuelo, de amigo.
El fue un trabajador, un luchador,
un héroe, un campeón y el mejor papá del mundo.
Hoy en día se mantendrá muy querido
por todos sus amigos y familia.
Y para mí, será mi ángel de la
guarda que me protege, como siempre fue.
Cris Da Silva
Suscribirse a:
Entradas (Atom)